sábado, 8 de febrero de 2014

Bell & Ross WW2 MILITARY TOURBILLON

Con el Vintage WW2 Military Tourbillon, la última aportación a su exclusiva colección de alta relojería, Bell & Ross expresa, una vez más, su visión personal del pasado. Al reunir un tourbillon, un regulador, un indicador de precisión y una reserva de marcha bajo una tapa protectora, evocando así una capítulo entero de la Historia, la marca exalta, de manera contundente, estas complejidades. Y mientras el espíritu y el carácter de esta pieza —limitada a una edición de en 20 ejemplares—, están inspirados en la tradición relojera de antaño, los materiales utilizados lo convierten en un reloj plenamente adaptado a su época que también mira hacia el futuro. 

UNA PIEZA DE ALTA RELOJERÍA QUE RECREA LA HISTORIA 

Diseñados para marcar el compás de los primeros años felices del incipiente siglo veinte, los relojes tuvieron que cambiar de aspecto para afrontar la Primera Guerra Mundial. Cuando aparecieron las nuevas armas en los campos de batalla, como los aviones de combate y los carros blindados, los instrumentos de relojería tuvieron que adaptarse a esta revolución tecnológica. De este modo, la funcionalidad, la fiabilidad, la precisión y la durabilidad se convirtieron en los parámetros esenciales. Para proteger el frágil cristal que recubre la esfera, algunos relojes fueron dotados de auténticas rejas de metal. 




LA TAPA DE PROTECCIÓN, QUE ANTAÑO SERVÍA DE ARMADURA, SIRVE ACTUALMENTE PARA CONTENER LAS COMPLEJIDADES 

Durante la Primera Guerra Mundial, el frágil cristal mineral de los relojes corría los mayores riesgos durante los combates aéreos y terrestres. Las rejas metálicas protegían las esferas, pero dificultaban la visibilidad y la lectura de las indicaciones. 


Hoy los cristales son de zafiro, por lo que resultan muy sólidos y no necesitan de protecciones. Por ello, además de ser evocadora del pasado, la tapa del WW2 Military Tourbillon pasa a ser una parte integrante del reloj, reforzando la legibilidad de la esfera gracias a sus formas curvas que realzan las indicaciones. 

Las aberturas dibujadas en el metal revelan toda la información horaria y sus complejidades, la mirada del usuario se concentre en lo esencial. Este protector se abre mediante una bisagra que revela la totalidad de la esfera y permite admirar su elegancia clásica; el reloj sigue siendo funcional incluso cerrado, gracias a las discretas graduaciones de los minutos. 
CUATRO COMPLEJIDADES EN UNA MISMA CAJA 

Al integrar las cuatro complejidades: tourbillon, indicador de precisión, regulador y reserva de marcha en la caja redonda del Vintage WW2 Military Tourbillon, Bell & Ross plasma en un nuevo rostro el espíritu de la «alta relojería», manifestado desde el lanzamiento del BR 01 Tourbillon en 2007. 

La disposición en cruz de las diferentes funciones combina legibilidad y funcionalidad. Al levantar la tapa protectora se puede descubrir la esfera en su totalidad. La alternancia de un realce negro mate en el contorno, de superficies metálicas decoradas con «Côte de Genève» y de contadores adicionales que juegan con los contrastes para reforzar la legibilidad, crea una profundidad visual y un efecto de «tres dimensiones» que conjuga la elegancia con la precisión de las indicaciones. 

Fiel a su inspiración militar, que otorga prioridad a la legibilidad de los tiempos cortos, el WW2 Military Tourbillon dispone de un regulador, un principio relojero que disocia la lectura de las horas y de los minutos. 

Si la aguja de los minutos posee un eje central y barre toda la pantalla, la aguja de las horas dispone de una pequeña esfera propia a las 12 horas. A las 3 horas, otra aguja (el Trust Index) se mueve en un arco de círculo e indica el grado de precisión del movimiento en función de la tensión del barrilete. A las 9 horas se encuentra la indicación de la reserva de marcha (5 días) que completa la información facilitada por el indicador de precisión. Estas dos complicaciones son las que, juntas, permiten que el usuario no tenga que dar cuerda al movimiento para asegurar un funcionamiento óptimo del reloj. 


Por último, la esfera deja ver a las 6 horas la “jaula de oro” rosa del tourbillon, cuya rotación en un minuto permite al símbolo «&» de Bell & Ross desempeñar la función de un pequeño segundero. 

Fuente:
Bell & Ross